Bachillerato Internacional

RECHACEMOS LA PRIVATIZACIÓN Y EL GERENCIAMIENTO DE LAS ESCUELAS PÚBLICAS RECHACEMOS EL “BACHILLERATO INTERNACIONAL”

 Como advertimos en comunicados anteriores, el gobierno de la ciudad busca implementar en doce colegios secundarios públicos de la ciudad el “Programa del Diploma” que vende la organización extranjera Bachillerato Internacional (BI). Su implementación es una de las tantas formas de privatizar y fragmentar la educación utilizando recursos que tendrían que destinarse a solucionar los variados problemas que presenta la escuela pública por falta de presupuesto. No es un hecho aislado sino que se enmarca dentro de una política de aumento de subsidios a la educación privada y disminución en el presupuesto para mejorar la infraestructura y construcción de nuevas escuelas. Ejemplos de problemas de infraestructura sobran, pero este año el dato más relevante que tomó notorio estado público es que más de 7000 niños se quedaron sin su vacante en nivel inicial. El gobierno ya eligió: en vez de destinar el dinero del presupuesto educativo a la construcción de establecimientos educativos decide financiar el subsidio a escuelas privadas o, mucho peor, pagarle a empresas privadas para que se metan en las escuelas públicas (4.215.064 de pesos sería el pago del gobierno al BI sólo por las primeras capacitaciones, tasas del programa y evaluaciones). Eso, y no otra cosa, significa el desembarco del Bachillerato Internacional. Evitar que suceda, depende de nosotros.

Exigimos también que se escuche la voz de los docentes que rechazan la implementación del Bachillerato Internacional en sus colegios y que cesen las intimidaciones y las amenazas de sanciones para aquellos que expresaron públicamente su rechazo a esta empresa que sólo viene a contribuir a la privatización de la educación pública. ¿Cuál es la sanción por manifestar el rechazo a este ataque a la escuela pública? ¿Cuál es el problema de entregar un petitorio a los “verificadores del Bachillerato Internacional” para que se enteren de que hay muchos docentes que no quieren a esa empresa en el colegio? ¿Qué vía jerárquica no se respetó si el BI no constituye autoridad educativa nacional o estatal alguna? ¿Cuál es el inconveniente de que los docentes que hicieron las capacitaciones (muchos de ellos, sin siquiera haber sido informados claramente sobre el BI) no quieran participar de la implementación del programa? La respuesta a estas preguntas es clara: no hay sanción posible por expresar el rechazo a esta empresa que viene a privatizar la educación. Así como se pudo rechazar en el Normal 2 y el Normal 5, exigimos que se escuche la voz del Centro de Estudiantes del Normal 8 que rechazó el BI y de los numerosos docentes de dicho colegio que firmaron el petitorio en rechazo al Bachillerato Internacional y a favor de la democratización de la información y de las decisiones.

Desde Ademys rechazamos esta avanzada privatista a la vez que apoyamos y nos solidarizamos con todos aquellos padres, docentes y estudiantes que defienden la escuela pública ante las arbitrariedades de los gobiernos de turno.

Para ampliar la información y ver nuestros anteriores comunicados críticos del Bachillerato Internacional:

https://docs.google.com/file/d/0B7QqkS8RVal5dkpRcHk5QzhHM00/edit