NO A UNA REFORMA AUTORITARIA, PRIVATISTA  Y FRAGMENTADORA DEL SISTEMA PÚBLICO

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Rechazamos las Resoluciones 1346/14 y 1505/14 que implementa el   “Ciclo Básico” de la NES

El ministro Esteban Bullrich firmó el 10 de marzo la Resolución 1346/14 que establece el nuevo ciclo básico de la NES. El gobierno produce así el marco normativo que ampara la implementación de las “experiencias piloto” en un grupo de escuelas públicas y privadas en 2014, para su posterior generalización en 2015.

Entre los considerandos de la resolución se afirma falsamente que hubo “plena participación de todas las áreas y actores del sistema educativo involucrado”. En la presentación bajada por Planeamiento para la jornada del pasado 18/3 se mencionan, de manera vaga, las instancias de “diálogo” y los “aportes” que, dicen, fueron utilizados para la construcción del diseño curricular. De esta misma presentación se deduce que, cuando hubo “reuniones” y “consultas” con el “sistema”, las mismas se limitaron a la supervisión y equipos de conducción.

Sobre los supuestos “aportes de la comunidad educativa”, debe señalarse además que ninguna de las definiciones presentes en la Resolución 1346/14 fueron objeto de discusión en las “jornadas NES” de 2013, instancias pretendidamente “participativas” que el gobierno montó con tiempos que imposibilitan el tratamiento sistemático de ningún tema, y con escasa o nula información en tiempo y forma.

Marco y sentido político de este nuevo avance

Es necesario subrayar, una vez más, que la reforma en curso se enmarca en las normas nacionales vigentes desde la Ley de Educación Nacional 26.206, que preservan la estructura fragmentada y transferida a las provincias, y la vigencia de la educación privada y sus privilegios y subsidios en el sistema educativo. En este marco político y normativo las políticas del ministro Bullrich promueven un “modelo educativo” fragmentado, segmentado, charterizado y con evaluación externa en manos de “entes autárquicos” con financiamiento privado; es decir, un “modelo educativo” liquidador del sistema público, laico y gratuito.

La “NES” no puede entenderse aisladamente de estas políticas. Por eso Bullrich puso esta “reforma” bajo el mando directo de las corporaciones de la educación privada. Esto se evidencia en el “consejo asesor” armado por Mercedes Miguel, integrado por ex funcionarios del menemismo y representantes de asociaciones patronales de la educación privada como la COORDIEP (Junta Coordinadora de Asociaciones de la Enseñanza Privada de la República Argentina) y el CONSUDEC (Consejo Superior de Educación Católica); o en la designación de funcionarios y representantes de la Pontificia Universidad Católica Argentina al mando de la dirección de currícula. Se trata de una “reforma” a medida de la educación privada, dirigida por sus propios dueños. Estas autoridades “reformaron” las escuelas técnicas, legalizando el “doble estándar” entre escuelas públicas y privadas (verhttps://docs.google.com/file/d/0B7QqkS8RVal5WVBTaUFUMFF5OFU/edit?pli=1), decisión política que fue avalada por el Ministerio de Educación de la Nación en su Resolución Nacional 34, mostrando así la complicidad política entre Nación y Ciudad en este tema.

Lo anterior explica el autoritarismo de la “reforma”, negando toda discusión con la docencia y el sistema público y montando, en su lugar, simulacros de “participación” al mejor estilo de las reformas de los ’90 para presumir legitimidad.

Algunas consideraciones sobre la Resolución 1346/14:

1) Tratándose del diseño curricular de 1º y 2º año de la educación secundaria, el mismo impacta sobre programas de asignaturas que, entre 2002 y 2004, fueron elaborados mediante el trabajo colaborativo y articulado entre los equipos docentes de currícula y los profesores de las correspondientes disciplinas. Es al menos llamativo que el Ministerio no haya habilitado instancias de debate para reformular definiciones curriculares que, anteriormente, fueron tratadas en dispositivos participativos (como es el caso de las mencionadas).

2) El diseño curricular aprobado incorpora, además, definiciones  sobre “competencias” y “aptitudes” que se establecen como “norma” para el conjunto de los egresados del nivel secundario. Dispone asimismo, para cada asignatura de 1º y 2º año, “orientaciones para la evaluación” y “técnicas de estudio”. Ninguna de estas definiciones curriculares formó parte de los “pre-diseños” que se mostraron a la docencia en una de las “jornadas NES” de 2013, ni se habilitó discusión alguna con el colectivo docente sobre ellas. El peso asignado a dichas definiciones permite inferir que se busca vincular el diseño curricular aprobado con las políticas de evaluación externa promovidas por la actual gestión.

3) La Resolución 1346/14 presenta un “ciclo básico” aislado en sí mismo,desvinculado de los “ciclos orientados” que completarían los 5 años de la escuela secundaria, impidiendo visualizar la necesaria articulación y secuencia entre ciclos, las asignaturas y enseñanzas propuestas y la integralidad del nivel.

4 En la Resolución 1505/14 del 25 de marzo, que en su Anexo I fija una “grilla curricular de aplicación del ciclo básico” pero, en su Anexo II, expresa que dicha “grilla” puede “adecuarse“, respetando “como mínimo” el 60% de las horas establecidas para cada “espacio curricular”.

Cabría preguntarse por la coherencia exigible a todo diseño curricular, en tanto cualquier propuesta formativa debe expresar claramente el ajuste que guarda entre las enseñanzas que propone y los tiempos que prevé para su desarrollo. El enorme rango de variación permitido en estas normas dificulta identificar dicha coherencia. Peroestas “singularidades” son coherentes con una estrategia “flexibilizadora” del curriculum, explicitada por la directora general de planeamiento en “lineamientos” comunicados a la Supervisión en septiembre de 2013, claramente inspirados en propuestas generadas por la Vicaría Episcopal. Desde la Comisión de Media de Ademys criticamos esos “lineamientos” porque habilitan una enorme discrecionalidad patronal para manipular espacios curriculares, sus contenidos y cargas horarias y los puestos de trabajo docente según sus intereses, presentados como “libertad de enseñanza” demandada por las entidades educativas de gestión privada (verhttps://docs.google.com/file/d/0B7QqkS8RVal5Sm5scFFLWlZvZmM/edit?pli=1). Las “adecuaciones” permitidas por la Resolución 1505/14 dejan al arbitrio patronal hasta el 40% de las horas del ciclo básico de la escuela secundaria.

5) La actual gestión educativa ha puesto en práctica experiencias privatistas que, en sí mismas, producen una “flexibilización” regresiva del currículum de la escuela secundaria. Es el caso de la implantación del “Programa de Diploma” del “Bachillerato Internacional” en escuelas medias públicas (verhttp://www.ademys.org.ar/test_/boletines/bole27062013080907.html#nota3). Esto conduce a la privatización directa del currículum y la enseñanza, su subordinación a “diseños” elaborados por organizaciones privadas sin ningún valor pedagógico y a un gasto innecesario de recursos públicos para sostener un negocio privado. Es claro que la Resolución 1505/14 favorece la continuidad de este tipo de experimentos curriculares privatistas.

6) Estas nuevas Resoluciones generan, así, condiciones para una enormefragmentación de experiencias formativas y enseñanzas, que previsiblemente segmentarán aún más el nivel secundario profundizando las desigualdades educativas. Correlativamente, fomentan y extienden la precarización laboral docente a las escuelas públicas por tratarse del diseño curricular “oficial” del Ministerio para toda la educación secundaria.

7) En 2013 denunciamos la iniciativa de implementar “experiencias piloto” de la NES en 2014 y llamamos a la docencia a rechazar el ingreso a estas “experiencias”, entre otras razones porque promueven una mayor fragmentación del sistema público, porque implican una aceleración innecesaria del proceso dada laampliación de plazos acordada en el mismísimo CFE, y porque mediante la implementación anticipada el Ministerio pretende legitimar un cambio curricular sin participación efectiva de la docencia y el sistema público (verhttp://www.ademys.org.ar/test_/boletines/bole09082013063020.html#nota2). El nuevo “ciclo básico” de la NES reafirma todos los riesgos mencionados.

En este marco y con estos antecedentes, desde Ademys entendemos necesarioratificar el rechazo de la “NES” – ya expresado por amplios sectores de docentes y estudiantes que revirtieron la implementación de “pilotos” en sus escuelas – y este nuevo avance fragmentador. Invitamos a la docencia a continuar el debate colectivo para materializar el rechazo y continuar la lucha en defensa de la educación pública, universal, laica y gratuita, y por un proyecto político pedagógico democrático y de los trabajadores, superador de las políticas de fragmentación funcionales a los intereses corporativos privados.

Basta de reformas autoritarias y privatistas NO a la NESC.

Por un proyecto político-pedagógico de los trabajadores, en un sistema educativo público, único, universal, laico y gratuito

 

Invitamos a los docentes a debatir y elevar su posicionamiento.

Hagamos de las próximas jornadas un espacio de debate, reflexión y elaboración de propuestas del colectivo de docentes.