Cómo en todas las áreas y niveles, las escuelas de la modalidad de educación especial abrieron sus puertas en un cuadro de vaciamiento y sin las condiciones para garantizar un protocolo que ya de por sí es inviable, lo que deja en evidencia que el objetivo no es pedagógico. Más aún si se tiene en cuenta que la situación epidemiológica, reafirma que no hay condiciones para la presencialidad, ya que continúa la circulación comunitaria del virus Covid 19, y que en la CABA, al 9 de marzo hubo 312 contagios cada 100 mil habitantes en los últimos 14 días, cuando la Asociación de Pediatría Argentina establece que con más de 200 casos las escuelas abiertas implican un riesgo alto de contagios.
Durante el transcurso de la reunión lxs participantes e informes que enviaron docentes de distintas escuelas, además de dar cuenta de la gravísima situación que atraviesa la modalidad, coincidieron en que la situación es mucho más grave porque la característica de educación especial, implica, en muchas situaciones, un acercamiento entre docentes y estudiantes, que impide el distanciamiento, por lo tanto, el protocolo se vuelve aún más impracticable.
En el caso nuestra modalidad el protocolo establece “intensificar (…) uso de tapaboca, máscara facial, ventilación, lavado frecuente de manos, limpieza, desinfección, etc”. Pero el gobierno no entrega elementos de protección suficientes, ni la cantidad de sanitizantes necesarios, mucho menos camisolines que ayudarían a una mejor protección o barbijos transparentes que favorecerían las posibilidades de comprensión del lenguaje. Ante la falta de todos estos elementos, son las cooperadoras y/o lxs propios docentes quienes tienen que destinar dinero de su bolsillo para la compra de los mismos. Tampoco se ha planificado ampliar las plantas funcionales de manera que se reduzcan los contactos entre niñes, al contrario, son intensas las presiones para ampliar la cantidad de estudiantes en los grupos.
Los materiales de trabajo áulico, lúdico y pedagógico tampoco son garantizados. Estamos hablando de escuelas en donde la enseñanza y el aprendizaje se construye a partir de la experiencia alternada entre los objetos concretos y los gráficos y en donde, históricamente, los juegos y juguetes que hay, son aportados por la docencia. Este esquema sin embargo entra en crisis frente a la necesidad de restringir la manipulación de objetos compartidos por lo que debieran multiplicarse los materiales para que a nadie le falte. Pero tampoco hay respuesta. Ni dispositivos, ni juegos de mesa, ni hojas, ni tizas.
A la falta de insumos y recursos, hay que agregar los graves problemas de infraestructura de muchos edificios escolares, que son previos a la pandemia, pero que se agravan en esta situación, como es el caso de la EII 21, que tiene faltante de agua, lo que impide la higienización.
Las necesidades de alimentación de les niñes tampoco se tienen en cuenta a sabiendas de que la población de toda la modalidad se encuentra entre las más afectadas por la crisis económica y el ajuste. Lxs estudiantes manifiestan tener hambre durante la jornada escolar, llegando a angustiarse y, en algunos casos, no pudiendo continuar con la clase.
En este cuadro, muches docentes de manera individual o grupal, como es el caso de la EEE 7, realizan actas y escritos exigiendo distintos materiales y encuadres de trabajo apelando a que efectivamente se maximicen las condiciones de higiene y salubridad. Es este el punto que debemos intensificar. Por escuela, por escalafón y en un unidad con toda la modalidad y la docencia para imponer las condiciones en la presencialidad o la modalidad virtual cuando no se cumplan, privilegiando la salud y no, la regimentación y el interés empresarial. En el mismo sentido, debemos exigir dispositivos y conectividad para docentes y estudiantes exceptuados y/o que son aislados y que deban continuar el proceso educativo de manera remota.
Mientras tanto los contagios en escuelas siguen aumentando y nuestra modalidad no es la excepción. La ridícula cantidad de 16.000 vacunas de esta primera etapa, cuando somos 111.000 docentes en la Ciudad no garantizan la inmunidad. Por eso, todo indica que continuarán los conflictos por la imposición del gobierno acerca de que en las escuelas no se informe a todo el equipo docente sobre casos positivos del personal del establecimiento y de que se intente evitar que los contactos estrechos se aíslen, pretendiendo que se viole lo establecido por protocolo. En este sentido, llamamos a las supervisiones y a las conducciones de las escuelas, a unirse a lxs docentes contra las arbitrariedades del gobierno.
Otras de las problemáticas que se comentó es la falta licencias para docentes que viven con familiares de riesgo y de dispensas para educadores con hijos menores. Así como también, que lxs docentes de riesgo se vean impedidos del derecho a participar de los actos públicos.
Con respecto a los actos públicos en línea, se manifestó una gran indignación porque no están actualizados los listados, además de la cantidad de irregularidades que hace que muchxs compañerxs se vean perjudicados y que queden cargos vacantes. A lo que hay que agregar la falta de actos públicos de ACDM. Esta situación se agrava, porque se comenzó a implementar artículo 66 “l”, que implica que los cargos se cubran por fuera del listado, profundizando la violación del carácter democrático y transparente de acceso a los cargos. Por eso se reafirma continuar la lucha por la restitución de las funciones históricas de las juntas de clasificación y la elección de lxs vocales por el voto directo de lxs docentes y el rechazo a las propuestas salariales de miseria del Gobierno de CABA, alineadas con el techo salarial dictaminado por el Gobierno Nacional.
El gobierno nacional y de la ciudad imponen las clases presenciales aprovechando la pandemia para profundizar el ajuste, lo que hace que perdamos condiciones salariales y laborales. Por eso, es necesario que promovamos la organización y deliberación en las escuelas para luchar por nuestra salud, contra las arbitrariedades del gobierno, y también es necesaria la unidad con todo el gremio para dar la pelea de conjunto por salario, por la transparencia en los actos públicos, y por el resto de las reivindicaciones.
Desde esa perspectiva, resolvimos:
- Continuar denunciando que no hay condiciones epidemiológicas para la presencialidad
- Convocar a una nueva reunión abierta para dentro de dos semanas
- Impulsar la organización y pronunciamientos por escuela denunciando la falta de recursos y condiciones
- Campaña de fotos con los distintos reclamos
Exigimos
Que el gobierno establezca un calendario de vacunación en el marco de un plan de vacunación universal y gratuita y coloque todos los recursos necesarios que reclama la docencia.
Ampliación de POF para atender las necesidades de la modalidad.
Recursos materiales didácticos y pedagógicos. Barbijos transparentes. Camisolines. Anteojos de protección.
Que se garantice un refrigerio para cada niñx durante la jornada escolar.
Dispositivos y conectividad para docentes y alumnxs.
Salario inicial de $55.000 para el cargo de jornada simple, equivalente al 50% de aumento, blanqueo de cifras, recuperación del salario familiar y la incorporación de la cláusula de indexación. No a la diferenciación salarial a la baja.
Actos públicos transparente. Actualización de los listados. Restitución de las de las funciones históricas de las juntas de clasificación y elección de los vocales por el voto directo de lxs docentes. Urgente actos públicos para ACDM.
Dispensas por cuidados de niñes, y convivientes de riesgo.
Derecho a lo toma de cargos para docentes de riesgo
Comisión de Educación Especial