Casi 4 meses después del día de Educación Especial, el Ministerio de Educación del gobierno porteño por intermedio de la Dirección de la modalidad, convoca a las “Jornadas de Formación”. La misma consta de expositores de distintas temáticas y la “presentación de experiencias en el marco de “Cómo abordar las prácticas Pedagógicas en tiempo de pandemia”
En primer lugar, es difícil confiar en las verdaderas intenciones de la convocatoria, si hace un par de semanas la propia titular de la cartera educativa, Soledad Acuña, nos atacó, sobre todo al proceso de formación, diciendo que elegimos la docencia por fracasar en otras carreras, que somos zurdos, pobres, sin capital cultural y que adoctrinamos haciendo política partidaria. Bajo esta situación, ¿podemos confiar en los verdaderos intereses de la convocatoria? ¿Podemos aprovechar realmente las jornadas si la máxima responsable del Ministerio de Educación nos agravia de tal manera? Muy difícil, por eso desde Ademys consideramos que es inadmisible que Soledad Acuña siga en su cargo, y exigimos su renuncia.
Luego, no sólo no pidió disculpas, sino que ratificó esa posición por medio de un e-mail que envió a todxs lxs docentes. Está claro que el ataque de la ministra (que además intenta enfrentarnos con las familias llamando a la delación), dejan en evidencia su desprecio sobre lxs trabajadores de la educación, y su correlato con el vaciamiento de la escuela pública, el ajuste que vienen imponiendo y que pretenden profundizar.
En el mismo sentido, las jornadas de formación se convocan bajo el titulo “DEL IMPACTO DE LA PANDEMIA AL DEVENIR CREATIVO”. Al igual que todxs lxs docentes, en Educación Especial hemos realizado un enorme esfuerzo y desarrollado al máximo la creatividad durante la pandemia para garantizar el contacto pedagógico con lxs estudiantes porque el gobierno no garantizó conectividad ni dispositivos ni para estudiantes ni para docentes. En el caso de la comunicación con lxs alumnxs de educación especial, es más grave porque por las particularidades de la modalidad, docentes y estudiantes necesitan buena conectividad, buenos equipos y dispositivos adaptables. Por eso exigimos distribución de dispositivos accesibles y conectividad libre para todes les estudiantes del nivel.
Pero también tuvimos y tenemos que recurrir a la creatividad para llegar a fin de mes, ya que en medio de la pandemia, el gobierno, en el marco de en un acelerado proceso inflacionario, nos congeló el salario por medio de la Ley de emergencia financiera y económica y dejó centenares de docentes sin cargo producto de las arbitrariedades de los actos públicos virtuales.
De la misma manera podemos describir la demostración de creatividad para expresar el rechazo a las actividades presenciales, para evitar contagiarnos de covid, ya que impusieron la vuelta a los edificios escolares para actividades educativas. La presencialidad es rechazada por la mayoría del gremio así como por las familias. Por eso se evidencia una bajísima asistencia, ya que en el marco de la actual situación epidemiológica, implica un enorme riesgo de contagios para estudiantes, sus familias y docentes. Sin embargo, la ministra insiste, y sin tener en cuenta cómo desarrollará la pandemia, ya plantea el adelantamiento del ciclo lectivo 2021 para mitad de febrero y con la totalidad de estudiantes presentes, y sin haber invertido para solucionar los graves problemas de infraestructura ni acondicionar los espacios para mejorar la prevención.
Ajuste bajo la demagogia de la inclusión
En las conclusiones de la fundamentación de las jornadas, pretenden hacernos creer que en parte son para reconocer nuestro trabajo. Difícil también creer, porque si hubiera un reconocimiento, no pagarían salarios de pobreza, por ejemplo. Además, terminan planteando que somos convocados para “reflexionar y buscar respuestas conjuntas, que permitirán interactuar y abrir la modalidad a todos los niveles educativos que componen el Sistema Educativo”. No está mal interactuar con todos los niveles educativos, consideramos que es una falencia enorme la falta de comunicación. Tendría que ser sistemático y con más espacios de articulación entre educación especial y el resto de los niveles. Pero sobre todo, no es inocente que en la fundamentación, esté ausente el planteo sobre la reflexión de los procesos en las Escuelas de Educación Especial.
Desde la Comisión de Ademys no nos oponemos a la inclusión, pero, venimos denunciando que el gobierno de la Ciudad, con el demagógico planteo de la inclusión plena, pretende avanzar en el ajuste de la modalidad y el intento de cierre de escuelas de Educación Especial. Y lo hace amparado en la Ley de Educación Nacional y las resoluciones del CFE.
Ya está planteado el traslado de la Especial 14 a la EII N° 3, lo que implica el cierre de un edificio de Educación Especial, cuando en realidad corresponde que construyan una escuela propia. Además, seguimos reclamando por la construcción de un espacio para el CEI 19 del DE 19. Así como escuelas de especial en los distritos donde no hay o en aquellos donde hay superpoblación.
Pero además, es evidente que no les interesa la inclusión porque no crean los cargos estatutarios necesarios para garantizar esos procesos. Por el contrario, favorecen el negocio de empresas privadas por medio de las injerencias de las obras sociales, que contratan APND, de forma precaria, con salarios por debajo de lxs docentes y sin los mismos derechos.
Además, estando a dos semanas del cierre del ciclo lectivo, el ejecutivo no ha cumplido con la exhibición de los listados ni ha fijado fecha para los concursos de traslado, acumulación e ingreso. Esta arbitrariedad es producto de la eliminación de las funciones históricas de las juntas de clasificación y de haber terminado con el voto de les docentes para la elección de los vocales, con el objetivo de avanzar en la elección a dedo. Exigimos que el gobierno por intermedio de la Coreap, publique los listados y garantice los concursos en tiempo y el carácter democrático y transparente de los mismos.
Esta situación, tiende a empeorar con el presupuesto de ajuste que presentó Larreta para el año que viene. Y es de ajuste, porque toma la proyección del 29% de inflación contemplada en el presupuesto nacional, mientras que la estimación inflacionaria del propio Banco Central estima que para fines del 2021 será de casi el 50%. En este marco, los salarios aumentarán por debajo de la inflación, lo que implica que otra vez estatales y docentes volvamos a perder poder adquisitivo. Pero además, hay un fuerte recorte en obras públicas, que afectará a las escuelas, donde no sólo no construirán las escuelas necesarias por lo que miles de estudiantes volverán a quedar sin vacantes, sino que tampoco resolverán los problemas de infraestructura. Se da en el marco del enorme déficit fiscal del gobierno nacional, que le quita parte de los recursos de la coparticipación al gobierno porteño, no sólo para los salarios de la policía bonaerense sino que también, para pagar la fraudulenta deuda con el FMI.
Por todo lo desarrollado, llamamos a los docentes de Educación Especial a promover espacios de debate, a analizar la situación, a organizarnos y luchar contra el ajuste en la modalidad, por la construcción de escuelas especiales, por la creación de cargos para garantizar los procesos de inclusión, por la exhibición de los listados y los concursos de traslado, acumulación e ingreso, pero también a pelear con el conjunto del gremio para echar a Soledad Acuña, contra el ajuste de Larreta y de Alberto Fernández, por reapertura de paritarias y aumento de salario acorde a la inflación, y la lucha también junto a otros sectores por el no pago de la deuda y la ruptura con el FMI.
Comisión de Educación Especial de Ademys